Aunque la madre Tierra carece de voz, se expresa
en los bosques y valles, nos cuenta la historia del ser humano ligado a la
naturaleza, en los tiempos donde se respetaba, recompensaba y protegía su
manantial de vida; hoy queremos salvaguardarsus preciados tesoros para retornar al origen.
Aunque el ser humano, guiado por su ambiciosa
pretensión de controlar la vida, ha deteriorado y herido la sabia que emana de
la Madre Tierra, quien al ser tan exuberante y hermosa nos brinda sus
servicios; hoy debemos recompensarle, unidos por nuestros sueños,
restablezcamos este vínculo con la amorosa vida.
En este lado del cielo, el planeta clama, no
puede defenderse de la destrucción que se lleva a cabo en su cuerpo, dejando
cicatrices en el aire, en el agua y en la tierra; en su atmósfera, sus mares y
ríos, sobre su suelo diverso utilitarismo y codicia ; ella se queja, se conmueve, se lamenta; pero
solo en las manos aun indolentes de los seres humanos se encuentra su destino.
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